Pusimos en marcha el plan de acción 2020 junto a AFULIC
Realizamos la primer capacitación en AFULIC. El taller estuvo orientado a trabajar la motivación y gestionar una mejora en la comunicación interna. Se abordaron temas como la responsabilidad, el reconocimiento efectivo de los logros del voluntariado, la escucha activa y la asertividad.
En un post anterior, hablamos sobre qué es la Responsabilidad Social Empresaria y cuáles son las maneras en que las organizaciones suelen adoptar esta forma de gestionarse. Entre otras cosas, dijimos que “RSE significa hacer negocios de forma compatible con el desarrollo sustentable de la sociedad, preservando recursos ambientales y culturales para futuras generaciones”.
Además, en nuestro artículo, te adelantamos cuáles eran las acciones que desde Humaniz estábamos planificando para el 2020 en este sentido: trabajar con diferentes ONGs para acompañarlos en el desarrollo de sus grupos internos (RRHH) y ayudarlos a mejorar sus procesos de trabajo.
Hoy queremos contarte que hemos dado nuestro primer paso junto a AFULIC. En el transcurso del mes de febrero, desarrollamos un taller destinado a los responsables de Subcomisiones con la finalidad de acompañarlos en su trabajo y en su interacción con los voluntarios/as. Fue un espacio de dinámica vivencial, reflexiva y participativa, que buscó fortalecer competencias personales y grupales.
El taller estuvo orientado a trabajar la motivación, fortaleciendo el vínculo con el voluntario y estimulando el trabajo en equipo. Con el fin de gestionar una mejora en la comunicación interna, desarrollamos algunos temas como la responsabilidad, el reconocimiento efectivo de los logros del voluntariado, la escucha activa y la asertividad, entre otros.
Los ejes principales del taller
Durante este primer encuentro con AFULIC, trabajamos sobre la comunicación efectiva, que contribuye a eliminar malentendidos y todo indicio de confusión. Esta herramienta ayuda, además, a fomentar un entorno laboral armónico y a optimizar la productividad. También permite establecer un buen equipo de trabajo que cumpla con los objetivos de manera rápida y con facilidad.
Mostramos que habilidades como la asertividad y la empatía hacen a una comunicación efectiva.
El desarrollo de la empatía permite a las personas ser más solidarias, flexibles y tener mayor capacidad para influir sobre las emociones. Además, una persona empática es capaz de comunicar aquello que sabe para ayudar a los demás, tiene mayor capacidad de autocrítica y fomenta el trabajo en equipo.
Al trabajar sobre la asertividad, evidenciamos que la persona asertiva establece una comunicación clara y directa con los demás, diciendo lo que se quiere decir, sin herir los sentimientos, ni menospreciar la valía de los otros, sólo defendiendo sus derechos como persona.
Otra habilidad muy importante a tener en cuenta para lograr una comunicación efectiva, es la escucha activa. Esta habilidad se manifestó al tratar no solo de escuchar lo que la persona está expresando en forma directa, sino también los sentimientos, ideas y pensamientos que acompañan lo dicho.
Además, no debemos olvidar la comunicación no verbal, que es tan importante como la expresada en palabras. En este sentido, se trasladaron algunas recomendaciones al grupo, ya que un simple gesto, mirada, sonrisa o movimiento corporal puede significar más que lo verbalizado.
En síntesis…
Una buena comunicación o una comunicación efectiva nos lleva a obtener un mejor clima laboral. Éste repercute en el estado de bienestar de las personas que interactúan dentro de la organización, fortaleciendo así la motivación necesaria para realizar las actividades en equipo. Y ya sabemos que un equipo de trabajo motivado tiene más probabilidades de obtener mejores resultados.
Próximamente te contaremos más sobre nuestra interacción con las ONG de la ciudad. Si querés saber más sobre nuestro trabajo, ¡ponete en contacto!
